Barú: un paraíso olvidado, donde llegar es casi un milagro

Llegar a este poblado es una odisea, los vehículos con doble tracción deben convertirse en anfibios en el sector de 'la Playeta', pues la vía está devorada por las olas del mar y la única manera de pasar es cuando hay marea baja.

Según Yoryanis León Molina, habitante de Barú, el trayecto de vía sin pavimentar es de 13 kilómetros y los vehículos pueden tardar dos horas en el recorrido debido a su mal estado y en caso de emergencia los transportadores pueden llegar a cobrar hasta 300 o 400 mil pesos para llevar a alguien a Cartagena.

Las madres de este lugar, como Alexis Megrano que tiene 3 hijos pequeños, dice que cuando hay una enfermedad de un menor es una odisea poderlos llevar a la capital de Bolívar para que reciban una adecuada atención y una gripa o enfermedad de un pequeño requiere por lo menos de trescientos mil pesos para el transporte para poder buscar su remedio.

María Claudia Fernández es nativa de este lugar, dice que otra vía para llevar a Cartagena es en lancha, pero la persona tiene que disponer de un millón de pesos, lo que costaría un tiquete de Bogotá a Miami.

Aunque hay un puesto de salud en Barú, no cuenta con medicamentos adecuados para tratamientos de complicaciones y según uno de los líderes comunitarios no hay ni un nebulizador para una afección respiratoria y tampoco en ocasiones guantes quirúrgicos necesarios para los servicios de odontología.

Dicen los líderes comunitarios que los médicos atienden por lo general en semana y los fines de semana han tenido algunas dificultades.

La situación es tan compleja, que como no hay ni agua potable, ni servicio de acueducto, las personas que resultan heridas deben conseguir bolsas de agua para ser atendidas.

Según el líder Dioris Enrique Pacheco, toda esta problemática social es pensada para que ellos emigren debido a que no hay condiciones de una vida adecuada, es preferible dejarle este hermoso paraíso a quienes quieren aprovecharlo para el turismo.